MERCURY CITY TOWER
Expresión de eficiencia y modernidad
Texto: Joaquín Esteva
Con 339 metros de altura, la Mercury City Tower no sólo es la edificación más alta de Moscú, sino de Europa, además ser la más acabada propuesta del diseño arquitectónico postmodernista, el cual además del dinamismo que proyectan su formas y líneas atrevidas, redunda en las más avanzadas soluciones orientadas a la optimización de recursos como el agua y la energía eléctrica.
El edificio se eleva con perfil cónico, flanqueado con bloques trapezoidales, y aunque en principio se propuso un recubrimiento plateado, finalmente se optó por utilizar cristales en color bronce, cuyo tono da gran realce a la estructura.
A las 130 mil toneladas de concreto vertidas durante su edificación, incluido el hormigón armado resistente al calor, se suman 35 mil toneladas de refuerzos, así como mil 500 toneladas de acero que se utilizaron en el revestimiento cristalizado de la fachada.
Sin duda, una las características más relevantes del edificio ruso es el método de recuperación del agua que utiliza, el cual recurre a la filtración de la nieve que se derrite durante el día que después canaliza a los sistemas hidrosanitarios, además de que las grandes áreas de todos los pisos son iluminadas hasta en 70 por ciento con luz natural, y el sistema eléctrico de iluminación en todos los pisos recurre a la tecnología LED, con el consecuente ahorro en energía que propicia.
Los constructores
Las firmas Rasen Construction, Frank Williams & Associates y Mikhail Posokhin Gennadiy Sirota ejecutaron el proyecto de construcción, el cual inició sus operaciones en agosto de 2007 hasta que su culminación, después de seis años, luego que el piso 75 alcanzó su fase final con la instalación de los acabados.
Los sistemas de muros-cortina del edificio fueron diseñados por la compañía china CNYD, y su instalación fue resposabilidad de la firma estadounidense Gartner.
La suma de los 75 pisos y los cinco niveles subterráneos suman un total de 174 mil metros cuadrados de construcción, unidos por 31 elevadores que cuentan con sistemas de alta velocidad para agilizar la movilidad del personal.
La Mercury City Tower está ubicada en el más importante centro de negocios de la capital rusa, conocido como International Business Centre de Moscú, y se encuentra entre los rascacielos más grandes del mundo con similar naturaleza, entre ellos el Canary Wharf, de Londres, y La Dèfense, en París, aunque su escala es mucho mayor: una singular torre que destaca en el horizonte gracias a su forma y al revestimiento de color cobre brillante.
Seguridad y confort en cifras
La arquitectura de la Mercury City Tower es considerada del tipo europeo contemporáneo, ya que comprende los factores necesarios para proporcionar seguridad y confort a sus residentes y visitantes.
Con uso de suelo mixto, integra apartamentos residenciales, zona comercial y despachos para oficinas.
Cuenta con 130 mil m² dedicados a oficinas y 40 mil m² para uso residencial. En los primeros 40 pisos del edificio se encuentra el espacio para oficinas y los pisos superiores restantes se integran con apartamentos, además de aproximadamente 19 mil metros cuadrados en “cajones” de estacionamiento.
En la parte superior de la torre, una gran cortina de tecnología LED ilumina las cuatro caras del edificio.
Las vías de acceso son independientes para oficinas, residencias y zona comercial, además de contar con tres escaleras mecánicas.
Los apartamentos están disponibles con una superficie construida de 224 m² y 226 m², y los espacios para oficinas comerciales son de seis tamaños con el fin de adaptarse a los requerimientos de los usuarios.
El edificio tiene acceso al Metro de Moscú y está equipado con un avanzado sistema de ventilación integrado y otro diseñado para prevenir y enfrentar incendios de la manera más eficiente.
